viernes, 30 de noviembre de 2007

Queridos Chamacos:


Quiero agradecerles un semestre de sonrisas y de afecto. No hubo un solo día en que no hayan embellecido mi mañana ni pasado una clase en la que no me enseñaran algo: No existe uno solo de ustedes de quien no me sienta orgullosa y les aseguro que si el currículo tuviera un valor real, ningún puesto adornaría el mío más que el incluir sus nombres en él. Gracias por haberme regalado su confianza, cariño, solidaridad y paciencia, mi ciclo terminó pero los llevo a todos en el corazón porque no pido permiso para quererlos y, a pesar de que haya quien se resista, ahí se quedan nuestros juegos, nuestros proyectos, nuestras tareas y hasta nuestras discusiones para iluminar mi camino siempre.
Dicen que la tarea más dura de todo educador es saber que un día el alumno no nos necesitará porque nos habrá superado, siempre lo he entendido así, sin embargo, si sienten que todavía puedo aportar algo a sus vidas no duden en buscarme que siempre estaré dispuesta.
Hay tres cosas que quisiera decirles y que al menos a mí me han ayudado par ir pasando la materia más difícil de todas que es la vida:

ü Vivan apasionados bajo cualquier pretexto
ü No confundan los valores con los prejuicios
ü Atrévanse a ser ustedes mismos, que cualquier precio es poco por mantener la congruencia y el valor de luchar por lo que creemos sin claudicar jamás

Feliz vida. No son solos ni están solos son parte de un mundo en constante construcción que depende de ustedes para ser mejor y así, como el efecto mariposa, todos sus actos repercuten en ese gran proyecto que llamamos comunidad, actúen con responsabilidad y en consecuencia.


La Miss más cursi del mundo

Regina Freyman